Fibrosis quística

viernes, 20 de junio de 2008

Fibrosis Quística (FQ):




La FQ es una enfermedad congénita que se transmite con un patrón de herencia autosómico recesivo. La misma se caracteriza por enfermedad pulmonar crónica, insuficiencia pancreática exócrina e incremento de electrolitos en el sudor, y se manifiesta con una frecuencia aproximada de 1:2500 nacidos vivos. El defecto se halla localizado en una proteína transportadora de membrana (CFTR) relacionada con el trasnporte de iones cloruro en las células epiteliales.La producción de un moco viscoso y grueso en el tracto respiratorio es causante de la obstrucción de las vías aéreas facilitando así la infección bacteriana, principalmente por Pseudomona y Stapylococcus. La enfermedad pancreática es reponsable del retraso de crecimiento, esteatorrea y deficiencia nutricional, causando también íleo meconial en 20% de los neonatos. El diagnóstico de PQ en el período neonatal permite reducir la extensión y severidad de la morbilidad y la tasa de mortalidad temprana.En el screening se dosa tripsina inmunorreactiva (IRT) en sangre, la cual se encuentra aumentada en los pacientes afectados debido al bloqueo de los ductos pancreáticos por efecto de las secreciones características de esta enfermedad.En individuos fibroquísticos la IRT disminuye en forma progresiva a valores normales a partir de aproximadamente los 30 días de vida, debido a que el tejido pancreático normal es reemplazado paulatinamente por tejido fibroso y graso (21). Dado que no todas las mutaciones en el gen del CFTR resultan en niveles elevados de IRT, los Programas de screening Neonatal deben informar claramente que hasta el presente no es posible detectar el 100% de los casos analizados.

Alimentación del lactante

miércoles, 18 de junio de 2008


LACTANCIA MATERNA:






La promoción de la lactancia materna de los niños(as) durante los primeros meses de vida, debe ser un tema prioritario para el trabajo de los equipos de salud con las familias impulsando e incentivando su ejecución.

Se ha descrito que la lactancia materna posee tres funciones esenciales:
- Protección : Lactancia Protectora e inmunológica
- Nutrición: Lactancia Nutritiva
- Afecto: Lactancia afectiva

Concentrándonos en la función nutricional, la leche materna es el único alimento capaz de satisfacer todas las necesidades nutricionales durante los primeros 6 meses de vida, sin requerir otros alimentos o agregados como agua o jugos.

El niño(a) es capaz de mamar y tragar solamente líquidos en los primeros meses de vida, por la presencia de los reflejos de succión y deglución, que por definición son involuntarios.
La succión precoz y frecuente del calostro (la leche de los primeros días) mantiene en el niño(a) la glicemia en niveles adecuados, evita la deshidratación y la pérdida exagerada de peso en el recién nacido, proporciona además inmunoglobulinas y otras proteínas que son parte del sistema inmune y por lo tanto, de gran importancia para un recién nacido. El volumen relativamente pequeño del calostro durante los primeros días post parto, contribuye además a que el lactante pueda establecer en forma adecuada la coordinación entre las funciones de succión, respiración y deglución, y permite la baja de peso fisiológica de los primeros días de vida.

Respecto al afecto, el amamantamiento favorece la relación madre hijo(a) al permitir el contacto piel a piel entre ambos, ayudando a mantener la temperatura corporal del niño(a) y evitando el estrés.

Por otra parte, amamantar favorece el desarrollo normal de los maxilares, dados los movimientos que realiza la mandíbula y las posiciones que adopta la lengua para extraer la leche; esto constituye la deglución visceral o infantil.
Hasta los 4 meses los niños(as) presentan una menor capacidad para digerir hidratos de carbono complejos (almidones), debido a la menor actividad de la enzima llamada amilasa pancreática; la cual sólo alcanza un nivel de actividad significativo a partir de esta edad. También está presente, hasta los 4 a 6 meses, el reflejo de extrusión que determina que el alimento introducido en la parte cavidad bucal sea frecuentemente expulsado.

La recomendación de la lactancia materna se basa en los múltiples beneficios que ésta tiene para el niño, la madre y la sociedad.
Beneficios de la Lactancia Materna Exclusiva Para el Niño(a):
a) Nutrición óptima.
b) Fácil digestibilidad.
c) Mayor protección inmunológica y menor frecuencia y gravedad de infecciones como diarrea, otitis e infecciones respiratorias.
d) Mejor desarrollo intelectual. Estudios han demostrado que existiría un coeficiente intelectual 2,6 puntos más altos en los niños(as) alimentados al pecho materno vs los alimentados con fórmulas y esta diferencia se acentúa en los recién nacidos prematuros.
e) Mejor organización biocronológica y del estado de alerta.
f ) Patrones afectivos-emocionales más adecuados.
g) Mejor desarrollo dento maxilar y facial.
h) Menor frecuencia de trastornos alérgicos en el primer año de vida en los niños(as) con factores de riesgo (familiares de primer grado con enfermedades atópicas).
i) Menor riesgo de desarrollo de Diabetes Mellitus tipo 1, en niños(as) con antecedentes de familiares de primer grado con esta enfermedad.
j) Menor riesgo de obesidad en etapas posteriores de la vida, efecto que es proporcional a la duración de la lactancia materna.
k) Existe además fuerte evidencia científica en relación a que la lactancia materna podría disminuir el desarrollo de: meningitis, enfermedades inflamatorias intestinales, Diabetes Mellitus tipo 2, hipercolesterolemia, Linfoma de Hodgkin’s y trastornos de conducta
alimentaria de la infancia.



Acorde a la OMS-UNICEF, son consideradas “Recomendaciones Prácticas para una Lactancia Materna Exitosa” las siguientes:
a) Después de nacer, colocar el niño(a) sano seco sobre el abdomen de la madre (contacto piel a piel), en el postparto inmediato.
b) En el postparto, en sala de recuperación y luego de asear, pesar, medir y aún sin vestir, poner el recién nacido para que mame en contacto piel con piel con su madre.
c) Ayudar a la madre a iniciar la lactancia materna dentro de la hora siguiente al parto, asistiéndola y enseñándole o reforzándole una técnica de amamantamiento adecuada.
d) Fomentar la lactancia materna a libre demanda, día y noche, para lo cual es fundamental que madre y recién nacido permanezcan en habitación conjunta durante las 24 horas.
e) No ofrecer fórmulas lácteas y/o suero glucosado excepto por indicación médica en situaciones especiales, así como tampoco dar agua, ni chupete de entretención.
f ) Asegurar la posición adecuada del niño(a) y de la madre de manera que no se produzca dolor al amamantar y el bebé succione efectivamente; inicialmente con un mínimo de 8 veces en 24 horas, hasta establecer un horario más regular progresivamente (libre demanda).
g) En el caso de la madre que trabaja fuera del hogar, se debe enseñar en forma anticipada la técnica de extracción, transporte, conservación y uso de la leche materna extraída, recomendándole dejar entre 100 y 200 ml de leche materna por cada mamada.
h) Evaluar la alimentación de la madre y corregir las prácticas alimentarias inadecuadas, reforzando las adecuadas y recomendando además el uso de medicamentos, salvo indicación médica, evitando el consumo de tabaco y alcohol.
i) Supervisar la técnica de amamantamiento desde el primer control del recién nacido, creando grupos de pares que puedan compartir experiencias y que permitan resolver en conjunto problemas comunes, apoyados por personal de salud, capacitado en el tema. De esta manera se pueden desterrar mitos arraigados en nuestra cultura tales como: leche delgada, leche gatuna y otros.
j) Aunar mensajes coherentes entre los diferentes miembros del equipo de salud que permitan fomentar la práctica del amamantamiento.
k) Crear y/o reactivar las clínicas de lactancia materna en el nivel primario de atención, orientadas a asistir a las madres que demanden atención por cualquier problema relacionado con la lactancia.

Describiremos a continuación las recomendaciones para un amamantamiento correcto.
Partiremos señalando que el éxito de la lactancia materna depende principalmente de una correcta técnica de amamantamiento.
El requisito básico para un buen amamantamiento es una buena disposición y confianza de la madre en su capacidad de amamantar, reconociéndola como la forma naturalmente dispuesta para alimentar al niño o niña.
La técnica considera:
- Correcta posición de la madre y del niño(a). Existen varias posiciones que pueden usarse con éxito. Con mucha frecuencia la madre adopta la posición sentada con el niño(a) acostado de lado en sus brazos, en ese caso se recomienda:
- Siéntese cómoda con la espalda apoyada, colocando los pies en un pequeño piso.
- Si el niño(a) es demasiado pequeño utilice una almohada o cojín para acomodarlo a la altura del pecho.
- Sostenga al niño(a) recostado sobre su brazo, con el cuerpo enfrentándolo, abdomen con abdomen, la cabeza sobre el pliegue de su codo.Puede ayudarse con un cojín sobre la falda para sostener al niño(a) y afirmar el brazo.
- Sostenga la mama con la mano formando una “C”, con los cuatro dedos por debajo y el pulgar por arriba.
- Con el pezón toque el labio inferior del niño(a) varias veces hasta que abra ampliamente la boca, en ese momento, y con un movimiento rápido, atraiga el niño(a) hacia la mama, favoreciendo la entrada del pezón y casi toda la areola dentro de su boca.
- Si el niño(a) está bien adherido al pecho, al succionar, no debe provocar dolor, si duele es porque el niño(a) está mal adosado a la mama por lo que se debe retirar del pecho, introduciendo un dedo por la comisura bucal, presionando la encía inferior. Al colocárselo nuevamente al pecho preocúpese de que la boca del niño(a) esté bien abierta antes de acercarlo a la mama.
- La oferta de lactancia materna es libre demanda, lo que significa que el horario no es estricto, aunque probablemente sea cada 2 a 3 horas, día y noche, los primeros 30 días y luego progresivamente cada 3 a 4 horas hacia finales del 2do mes.
- La duración de cada mamada en general fluctúa entre 5 a 15 minutos por lado.
- En cada mamada el niño(a) debe recibir los dos tipos de leche de cada pecho: la leche inicial, con más contenido de lactosa y agua, y la leche final, con más contenido de grasa. Se recomienda alternar la mama con la que se inicia la alimentación.
- La producción de leche se establece durante las primeras semanas postparto por medio del balance entre las necesidades del niño(a) y el estímulo de la succión. En algunas mujeres, la producción de leche aumenta lentamente según las necesidades crecientes del niño(a), en otras, alrededor del tercer mes se presenta la llamada “crisis transitoria de lactancia”, en que el niño(a) mama con mayor frecuencia y la mujer cree no tener leche, se le debe recordar a la madre que si amamanta más seguido, aumenta su producción y vuelve a ordenarse.
- Muchos sabores de los alimentos que come la madre pasan a la leche, pero eso no quiere decir que al niño(a) le hagan mal. No existen alimentos que produzcan cólicos al niño(a) al ser consumidos por la madre que amamanta.
- La madre debe tomar sólo el líquido que desee según su sed; el exceso de ingesta de líquidos no aumenta la producción de leche.
- El alcohol y las drogas, incluido el cigarrillo, pasan a la leche, por lo que igual que durante el embarazo, se deben evitar durante la lactancia.
- Las mujeres durante la lactancia no deben automedicarse y deben advertir a quién le prescribe algún fármaco que está amamantando.
- Es posible mantener lactancia exclusiva al volver a trabajar. Al mes postparto ya debiera discutirse el retorno al trabajo, cuales son sus planes, horario de trabajo, distancia, cuidado del niño(a) y los beneficios legales. Si no va a poder llevarlo al trabajo o tenerlo cerca para amamantarlo, debe comenzar a practicar la extracción manual para desarrollar la destreza. El ideal es que el destete sea paulatino.


Por otra parte, es conveniente que la madre reconozca la succión efectiva para saber que el niño(a) se alimenta bien, reconociéndose como indicadores de Amamantamiento Correcto:
1) Sonido de deglución audible.
2) Actitud de niño(a) mamando tranquilamente, en forma rítmica y acompasada, claramente relajado y satisfecho.
3) Sueño tranquilo que dura alrededor de 1,5 a 3 horas entre mamadas.
4) Producción de volumen de leche constante y bajada de leche en relación al horario de demanda del niño(a).
5) Aumento de peso normal en el niño(a).
6) Promedio 6 pañales al día mojados con orina clara.
7) Promedio 4 deposiciones amarillas y fluidas diarias, durante el primer mes de vida.
8) Amamantamiento sin dolor, pezones y pechos sanos.

Finalmente, debemos señalar que así como se fomenta la lactancia, también es importante saber cuándo ésta no puede ser utilizada. Tradicionalmente las que se mencionan como contraindicaciones son:

a)Infección de la madre con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH)
b)Infección tuberculosa activa no tratada en la madre
c)Uso de fármacos o drogas u otras sustancias químicas que afectan a la madre, la leche materna o al lactante
d)Galactosemia clásica y algunos otros errores congénitos del metabolismo
e)Tratamiento oncológico en curso
f) y las indicaciones específicas del médico tratante.

Fuente: - Guía de Alimentación hasta la adolescencia. MINSAL 2005.
- Lactancia Natural. Capítulo 14 “Neonatología” disponible en: http://www.redclinica.cl/